Daneidy Barrera Rojas, más conocida como Epa Colombia, está en el ojo del huracán porque se conoció recientemente que la bogotana está siendo investigada por la Fiscalía por un grave delito.
Cabe mencionar que esta no sería la primera vez que Barrera enfrenta líos con la justicia, pues actualmente tiene varias denuncias activas en su contra y además, está enfrentando un proceso penal en el que podría ir a la cárcel por destruir una estación de TransMilenio.
Ahora se conoció, según fuentes reveladas por la Revista Semana, que Daneidy está siendo investigada por el delito de secuestro.
Según dijeron, la empresaria tiene abierta una denuncia interpuesta por Carlos Toro, el exdirector comercial de sus empresas de keratinas, porque al parecer en una pasada ocasión Barrera lo retuvo contra su voluntad.
El relato de la historia inició diciendo que todo pasó el 30 de julio, cuando Toro se encontraba en la sede Bocachica Sur, de las empresas de keratina, y de repente recibió una llamada de Daneidy preguntándole por su ubicación y exigiéndole que no se moviera del lugar hasta que ella llegara.
“Llega a este lugar la señora Daneidy Barrera con su esquema de seguridad, tres escoltas, y pide (a Toro) que se comunicara con la doctora Jenny Saldarriaga, para conocer o saber de su paradero”, dice la denuncia.
Posteriormente, según dice el documento Carlos realizó lo descrito y se comunicó con Saldarriaga, quién dijo que se encontraba en Medellín.
“¿Cuchito, qué dijo Jenny?, porque hasta que ella no venga usted no se va”, le preguntó Barrera al colgar la llamada.
Cabe recordar que Jenny Saldarriaga es la excontadora de Epa Colombia, y a quién se le acusó presuntamente, hace varios meses, de robar a la empresaria.
Inmediatamente, el exdirector comercial se sorprendió al saber que lo estaban obligando a quedarse en ese lugar, hasta que apareciera Jenny en Bogotá.
Y por tal motivo, la contadora no tuvo más opción que coger inmediatamente un vuelo y regresar a la capital.
Por otro lado, el impacto de Toro fue mayor cuando escuchó en ese momento que Epa les dijo a sus escoltas que por ningún motivo lo dejaran salir.
“La señora Barrera sale de la habitación y le da instrucciones a uno de sus escoltas para que se quedara custodiando la puerta y no lo dejara salir”, dice la denuncia.
Desde ese instante, el trabajador se encontró desconcertado por la actuación de su jefe y según contó, no entendía porque lo estaban reteniendo contra su voluntad. Además, el asunto se tornó intimidante pues la actitud tanto de los escoltas como de Daneidy era desafiante.
Ante esto, Carlos cuestionó a Barrera sobre qué estaba pasando y ella le respondió: “Nada, Cuchito, no se preocupe, solo lo estamos cuidando mientras llega Jenny, ¿o es que no va a venir?”.
Seguidamente, el colaborador respondió que sí, pero la empresaria lo amenazó.
“Más le vale, porque de acá no puede salir, porque, si sale de acá, tengo las esquinas llenas de bandidos esperando una llamada mía”, dijo.
Posteriormente, Barrera y sus escoltas lo dejaron bajo llave y aislado de tal forma que nadie tuviera contacto con él, y tampoco pudiera “escapar”.
“Los tres escoltas se quedan custodiando la puerta de ingreso y salida de dicho lugar, comportamiento que conllevó a que se notara preocupación y caos en el ambiente de trabajo, porque muchos empleados manifestaban incertidumbre por no saber lo que estaba pasando”, dice el texto.
Cabe resaltar que en la denuncia interpuesta se señaló que hubo varias personas que actuaron con complicidad frente a la retención ilegal que hicieron sobre el exdirector comercial y además, que nadie se preocupó por llamar a las autoridades cuando lo encerraron.
Al parecer, transcurrieron cuatro horas desde el encierro de Toro hasta que llegó Jenny a la sede Bocachica Sur donde se encontraban todos.
“La señora Daneidy al observar que había llegado la doctora Saldarriaga le solicita de manera irregular, incluso muy sorpresiva para todos, un informe de gestión de la empresa de los contadores, en cuanto a la ejecución de los diferentes procesos que se llevan en curso durante el mes, sin haber requerido el comité de manera formal, en las empresas que fueren de propiedad de la señora Barrera”, dice la denuncia que hizo pública la Revista Semana.
No obstante, lo más curioso del caso fue la petición que posteriormente les hizo Epa.
“Para sorpresa de las personas presentes en esa reunión, especialmente el equipo de contadores, la señora Barrera les empieza a realizar varias peticiones. Debido al buen rendimiento que han tenido en las empresas, con fines de darles manejo a las diversas responsabilidades tributarias que le conciernen pidió no facturar altos volúmenes de dinero ya que según ella a la hora del pago del IVA se le duplicarían los costos”, dice el documento.
Según se conoció, ninguno de los presentes aceptó dicha propuesta porque iría contra la normativa, y por tal razón la bogotana les realizó una serie de amenazas.
“Si no cooperaban con sus peticiones se verían inmersos en algún tipo de problema a nivel mediático valiéndose de su poder para destruir el buen nombre de la empresa de los contadores y de todos sus integrantes”, dice el texto.
Pero esto no fue todo, adicionalmente, según los documentos de la denuncia de Carlos quedó descrito que Epa fue más allá y lo amenazó involucrando a su familia.
“En las esquinas tenía unas mafias dispuestas a hacer cualquier tipo de daño que ella llegara a solicitar e inclusive manifestó: ‘yo en Medellín tengo a un hombre pendiente de los movimientos de sus hijos, sería muy triste que algo malo les pasara’”, dice el documento que publicó como primicia la Revista Semana.
Finalmente, el angustioso momento terminó con la liberación de Carlos, y tras todo lo que sucedió pidió a la Fiscalía investigar a la empresaria por delito de secuestro, y por las conductas y amenazas en las que incurrió.
Hasta el momento no se ha conocido ningún pronunciamiento público por parte de Daneidy, frente a estos hechos.